El lunes 20 de junio el comedor universitario amaneció cerrado dando lugar a una respuesta inmediata de los jóvenes. Un día después, las manifestaciones pican y se extienden
Estudiantes de la Facultad de Farmacia y Bioanálisis de la Universidad de los Andes (ULA) en Mérida vestidos con batas de laboratorio y con pancartas en sus manos trancaron la avenida 16 de septiembre impidiendo el paso vehicular por breves lapsos de tiempo exigiendo se respetaran sus derechos estudiantiles.
Los estudiantes demandaban insumos, reactivos para hacer las prácticas, un presupuesto universitario justo y la reapertura del comedor universitario que fue cerrado el lunes 20 de junio por falta de alimentos. Al menos 18 mil estudiantes dejan de recibir ese beneficio.
Jesús Pérez dirigente estudiantil del movimiento Dignidad Académica Universitaria (DAU) en esa casa de estudios, reveló que esa facultad carece de "resmas de papel y reactivos". Añadió que "los laboratorios están cerrados y que no tienen tanque de agua". Criticó al Decano José Rafael Luna, quien también es diputado ante la Asamblea Nacional (AN), y señaló que "desde que ganó en la AN, se desapareció de la universidad".
Posteriormente, se trasladaron hasta la avenida Las Américas esquina con el viaducto Miranda. Allí, algunos jóvenes se sentaron en el suelo formando un círculo como signo de protesta e impidiendo la circulación vial. Otros permanecieron de pie mientras cantaban consignas y sostenían los letreros.