Muchos son los atributos que Gloria Gaitán menciona de su padre Jorge Eliécer Gaitán, no menos de los que la historia de Latinoamérica le ha acreditado como “El Tribuno del Pueblo” en la lucha revolucionaria de Colombia por causas liberales.
El Líder Neogradino cumple hoy 68 años de su siembra, víctima de magnicidio por ráfaga de tiros que le segaron su vida el 09 de abril de 1948, cuando apenas comenzaban sus triunfos políticos. Con frases como “El hambre no es liberal ni conservadora”, constantes llamados a la lucha revolucionaría e hipnotizante discurso, además de su academia y pensamiento liberal, demócrata y reformista; desempeñó cargos de Senador, Ministro de Educación y del Trabajo, alcalde de Bogotá y apostó a la candidatura a la presidencia de la república de Colombia en 1946.
Gloria Amparo de las Mercedes Gaitán Jaramillo, a sus 78 años de edad, mejor conocida como Gloria Gaitán (única hija), nos reafirma hoy en exclusiva lo que auténticamente transformaría la historia de Colombia y Latinoamérica no fue su vida, sino su muerte.
El Caudillo Liberal, Eliécer Gaitán, quien buscó una revolución legal dentro de la constitucionalidad y la República, pero que tras su asesinato se dio el Bogotazó, se generó la Violencia con el deceso de unas 3 mil 500 vidas en un mes de turbas violentas, dan origen a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia hoy FARC EP, como lo narra la historia y nos manifiesta su primogénita.
Gloria Gaitán en esta conversación relata la vida de su padre, que parece una fotostática de líderes, que con similar discurso, han pasado a la historia, como el nuestro más reciente: Chávez. Gloria la Dama de Allende (primer presidente marxista del mundo) floreció cuando el depuesto presidente de Chile anunciaba embarazo en La Moneda: “ese niño va a ser hijo de Allende y nieto de Gaitán”.
Gloria, amiga, hermana y con convicciones reales hemos visto la historia y nos obliga a preguntarte ¿qué recuerdas de tu padre? ¿cómo lo describes? Primero un saludo al hermano pueblo de Venezuela y a ti Thania; me complace estar allí presente a través de esta entrevista. Bueno, es bonito decir que mi padre era un hombre de acciones colectivas, es decir, convocaba el pueblo nunca actuaba solo. Era un intelectual, pedagogo, apasionado por su pueblo, por los problemas que le aquejaban, daba la batalla con ideas pero desmerecía a indolentes, incomprensibles de los quereres populares. No habría dudas en su actuar porque su rasgo indeclinable en su pensamiento, su cuerpo de doctrina orgánico, llevaba claro el objetivo liberal con pensamiento marxista.
¿Cómo fue ese día del asesinato de su padre? Nefasto. Hubo acontecimientos que hoy en día recuerdo: de niña la imagen de mi padre estudiando, porque era un padre exigente, pero amoroso con ejemplo y virtudes. La cronología de su asesinato nosotras (mi madre y yo) lo vivimos desde el día anterior, mi madre tuvo imágenes oníricas que le develaron su muerte y yo en la escuela, una niña de la oligarquía me gritaba “ojalá maten a tu papá”. Y anteriormente él mismo durante un discurso vaticinó “Si a mí me llegará a pasar algo, en este país no quedará piedra sobre piedra”. Ese día, luego de la exitosa defensa penal del caso Cortés la noche anterior, Plineo Mendoza lo coloca frente a Roa Sierra, quien con un revolver le impacta justo cuando mi papá trata de resguardarse en la oficina de la que ya salía. Por eso recibe las balas por la espalda.
Recurrentemente se trata ese capítulo vinculándolo con los acontecimientos que se desencadenaron en el Bogotazo, pero al mismo tiempo con el nacimiento de las FARC Reflexionó – Estamos sumergidos en el capitalismo y el neoliberalismo en el marco de una cruenta guerra con implosiones en fuerzas armadas revolucionarias Colombianas. Para quitarle esa tenencia vulgar de riquezas en manos de unos pocos. Mientras la reforma agraria este anclada en el proceso de violencia, va a ser muy difícil que se logre la restitución de las tierras a los campesinos. Entonces asi no se daría un proceso de paz en Colombia.
Se habla de que necesitamos la reconciliación para la paz y no es así tenemos que hablar de rehabilitación de unos individuos que son unos criminales o por lo menos indolentes. Las palabras no solo expresan ideas sino que esbozan sentimientos. Entonces manejar las palabras para manejar las emociones y las ideas, tenemos que tener claro que el pueblo sea el que maneje el poder. Gloria declaró en el Congreso exactamente hace un año que era víctima de Álvaro Uribe Vélez ¿Por qué?
Demostré con pruebas presentadas en la Secretaría de la Cámara sobre actuaciones de ese funcionario (senador y expresidente de Colombia), en mi contra. Irrumpí en ese momento y lo volvería a hacer de ser preciso. Las voces no son apagadas cuando la verdad es un estandarte, enfatizó con voz fuerte.
Recuerdo que algunos representantes gritaban “Sin Censura”, “Sin Censura”, pretendiendo callarme con ello. Pero finalmente hablé sobre el atropello que hacían en contra de las victimas al no dejarnos entrar por temor a lo que dijésemos, recordando el mérito de los gaitanistas somos héroes, que claman por paz, justicia y revolución, es decir, construcción para una equidad con un deseo de cambio.
Para finalizar quiero decirles que soy una mujer que mantiene el fervor de la democracia y la paz para las naciones. Estaré en otra oportunidad que me concedan, para continuar lo que necesitamos decir. Toda revolución ha estado precedida por un cambio de mentalidad en las masas, pero la clase dirigente debería ser coherencia entre ideología y táctica, de lo contrario no funciona. Tenemos que hacer un trabajo de conciencia en todos los aspectos para politizar y organizar para el accionar.