
Este 19 de marzo de 2016 al escuchar al pueblo en una Asamblea de Ciudadanos con la presencia de los diputados democráticos de Mérida no puede uno concluir en otra cosa que efectivamente Santa Cruz de Mora y todo el Municipio Antonio Pinto Salinas se encuentra castigado por la ineficiencia de sus gobernantes, y en especial la de uno de sus hijos, nada menos que el Gobernador del Estado, al que parece no dolerle el destino de su tierra ni de su gente.
Esta tierra de gente trabajadora dedicada con esmero a las tareas del campo y la producción agrícola no sólo enfrenta los problemas comunes a todos los venezolanos en estos momentos de profunda crisis, sino también los que se derivan del empeño gubernamental de destruir todo lo que prospere, a excepción, claro está, de sus propios intereses.
Así tenemos que el mismo pueblo denuncia:
1. El engaño y abuso de poder que se manifiesta en la demolición de humildes viviendas ubicadas en el sector Pueblo Nuevo para facilitar la construcción de la casa familiar del Gobernador del Estado, a cambio de construirles viviendas a los afectados, cosa que nunca se hizo.
2. La multiplicación de obras inconclusas y abandonadas como:
a. El Hospital Heriberto Romero. Adquirido el terreno y comenzadas las obras a partir de la asignación de cuantiosos recursos presupuestarios, se descubre que el terreno no era apto, quedando en evidencia que todo el proceso se había realizado sin estudios de factibilidad. Se paralizaron los trabajos y hoy esa construcción es reina del abandono y desidia de unos gobernantes a los que no le importa la salud del pueblo.
b. El Puente sobre el Río Mocotíes. Este puente que debía unir al Sector Puerto Rico con la Avenida Antonio Pinto Salinas, después del colapso de la estructura original a raíz de la vaguada del 2006, se comenzó y abandonó. Se construyeron los estribos y hasta allí llegó el compromiso gubernamental con el pueblo.
c. El Mercado Artesanal. Ubicado en el sector Puerto Rico, donde funcionaba el viejo terminal, también se encuentra inconcluso y sólo sirve a intereses particulares de los contratistas del Gobernador.
d. La Unidad Educativa Bolivariana “Las Delicias”. Ubicada en el sector La Macana Baja de Santa Cruz de Mora, imparte educación en muy precarias condiciones a los niños del sector que llevan años esperando la culminación de una obra que, por la valla colocada en la que se anuncia la culminación de los trabajos, todo indica que se pagó completa y quedó inconclusa.
3. La urgente necesidad de una Planta de Tratamiento para potabilizar el agua que consumen los habitantes de Santa Cruz de Mora. En la ubicación del dique toma confluyen vertientes que provienen de aldeas ubicadas aguas arriba, cuyas actividades productivas y aguas servidas afectan la calidad del agua que se consume.
4. La ausencia de módulos policiales para asegurar la presencia de funcionarios del orden que resguarden a la ciudadanía. Es de urgencia el caso del Sector El Guayabal.
5. Las pésimas condiciones de la escasa infraestructura deportiva construida en el municipio Antonio Pinto Salinas. Especial mención merece el lamentable estado del Polideportivo Simón Bolívar.
6. La persistencia del desempleo y la ausencia de apoyo para los estudiantes.
7. El deterioro tanto de la vialidad urbana como de la rural. Especial atención merece el caso de la vía San Isidro-El Páramo-Las Coloradas.
8. La necesidad de viviendas dignas para el pueblo.
9. Las graves deficiencias del transporte público por la falta de repuestos e insumos automotrices. Entre las comunidades afectadas por este problema destacan: Mesa del Guamo, Montañuela, El Rayal, Mesa de San Isidro, El Palmital, Pie de Cuesta y el Páramo de San Isidro.
Esta larga lista de necesidades tiene como denominador común la existencia de unos gobernantes que no pueden esconder su altísimo nivel de vida y prosperidad, mientras el pueblo sufre y se empobrece. Llegará la hora del cambio.