“Denuncio la campaña difamatoria que Alexis Ramírez ha urdido en mi contra, sólo con la intención de tratar de amedrentarme y callarme ante tan gris gestión, la cual para tranquilidad de los merideños, afortunadamente culmina este año y tendrá que enfrentarse a la justicia”.
En lugar de ocuparse y darle solución a los graves problemas de toda índole que confronta la entidad merideña, el gobernador del estado, Alexis Ramírez, tratando de desviar la atención de su ineficiente gestión, arremete contra el diputado (AN), William Dávila Barrios, quien está consciente que no le perdonan su liderazgo que traspasa las fronteras regionales y nacionales, porque en su trabajo parlamentario es incansable, denuncia irregularidades, busca soluciones, propone leyes y trabaja de la mano con el pueblo.
No se explica Dávila Barrios, que persigue el mandatario regional, quien recurrió a la calumnia y difamación en su contra, como respuesta a su exigencia pública al Ministerio de la Defensa y a la Comisión de Defensa de la AN, para que se abra una investigación exhaustiva, sobre los 400 kilos de presunta cocaína que fueron incautados en el puesto de “El Quebradón”, los cuales transportaban en un vehículo militar y detenidos los responsables, entre ellos, el Mayor Juan José Sorda Ojeda, quien trabaja para la gobernación de Barinas.
Engrosa lista de sancionados
“No entiendo porque ese ataque contra mí (...) Acaso quiere desviar la atención de la incautación de ese cargamento..?”, dijo el parlamentario, quien le recomienda aclare su situación ante los tribunales nacionales e internacionales, por su inclusión en lista negra del Departamento de Estado; y, el Congreso de Estados Unidos aprobó una ley, que impone sanciones a funcionarios venezolanos que hayan violado derechos humanos contra manifestantes opositores, durante las protestas ocurridas en el 2014, así como financiar grupos armados que mantenían secuestradas, entre otras, las residencias estudiantiles “Domingo Salazar”.