William Dávila Barrios: Deprimente estado del IAHULA Obliga decretar emergencia médica sanitaria
- Marbella Mora Newman
- 19 ene 2016
- 2 Min. de lectura
Los profesionales de la salud, trabajan como si estuvieran en guerra, a la falta de agua, se suma equipos dañados u obsoletos como autoclaves, carencia de medicamentos e insumos, desde una solución fisiológica, hasta reactivos para laboratorio, ausencia de récipes y papelería, situación que los coloca al borde del cierre del principal centro asistencial de la región.
El Diputado (AN), William Dávila Barrios, recorrió este lunes las diferentes áreas de servicio del Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes (IAHULA), junto al Presidente del Colegio de Médicos de Mérida, Alexis Torres, el secretario de organización de la FMV, Rubén Gallo, y un connotado grupo de médicos especialistas, entre ellos el urólogo Rafael Contreras, el jefe de los médicos residentes y los coordinadores o jefes de cada una de las dependencias visitadas, quienes expusieron la grave situación que atraviesan en este momento.
“Voy a plantear a la comisión de salud, que está en manos de médicos, vengan a Mérida; porque debe declararse una emergencia sanitaria en el estado”. No funciona el IAHULA, pero tampoco hospitales como el de El Vigía, Tovar, entre otros. Existen problemas en toda la red primaria, secundaria, de allí que más del 60 por ciento de pacientes viene de los diferentes municipios, incluso de los estados: Táchira, Zulia, Barinas, precisó Dávila Barrios.
Lamentó la situación en que se encuentra este hospital tipo IV, pionero en el país en trasplante renal, resonancia magnética, instalada durante su gestión como gobernador del estado, hoy no queda ni siquiera vestigios de dicha unidad; por el contrario, advirtió, que no hay un servicio que no tenga problemas de agua, insumos, medicamentos, equipos dañados u obsoletos. En el fondo, dijo Dávila Barrios, “nosotros vemos la contradicción cuando el gobierno dice que la oposición quiere privatizar la salud, eso es mentira, la salud ya está privatizada y barbarizada, porque los pacientes tienen que salir a comprar todo lo que se requiera para su atención, productos que en la mayoría de los casos tampoco consigue por la grave escasez de medicamentos”.
Un promedio de 18 neonatos fallecen mensualmente
Es angustiante, señaló Dávila Barrios, lo que ocurre en neonatología donde se incrementó la tasa de mortalidad, con una pérdida mensual de unos 18 recién nacidos, por carecer entre otros de adrenalina, fórmulas, guantes y jabón. En neurología los pacientes convulsionando, no cuentan con clip ni coil de allí que no pueden resolver una aneurisma. En urología no tienen agua, en traumatología el autoclave no sale de reparación, sin contar con el caos que se presenta en otras dependencias como oncología, medicina interna, cardiología, obstetricia, emergencia, donde los pacientes deben llevar la mayoría de los insumos.
Agregó que se debe ejercer la acción contralora e investigar qué pasó con todo el dinero enviado al hospital, así como los créditos adicionales aprobados. “Nadie me ha planteado problemas de reivindicaciones gremiales. Esta es la verdadera realidad de la Venezuela que se nos deterioró y destruyeron. Tenemos que trazar estrategias a corto, mediano y largo plazo, para rescatar la salud y dar divisas flexibilizadas, porque todo se importa y no hubo una política preventiva con todos los cuantiosos recursos de dinero que ingresaron al país.
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